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La Iglesia de Santa María de Celón: construcción románica tardía del siglo XIII, con magnífica portada e imaginería: Nuestra Señora con el Niño (siglo XII), campana de 1.222, y pinturas murales de mediados del XVI, realizadas por un artista que se conoce con el nombre de "Maestro de Celón", que también dejó muestras de su arte en la iglesia de San Juan de Villaverde, próxima a Celón.
Castro de San Chuis: a unos 7 km de Pola de Allande, en San Martín de Beduledo, situado en la cima de un altozano. Relacionado con las explotaciones auríferas de la zona en época romana, está defendido por una muralla de 3 m de anchura y por profundos y anchos fosos. En él predominan los edificios de planta circular, aunque sobresale uno de planta cuadrada dividido en habitaciones, y otro formado por una habitación redonda a la que se adosan dos habitaciones rectangulares.Se ha hallado, entre otros restos, conservados en el Museo Arqueológico de Asturias, una escultura realizada toscamente en granito que representa un rostro humano, y que es el único ejemplo de escultura castreña encontrada en territorio asturiano.
Palacio de Peñalba-Cienfuegos: está situado en una colina dominando Pola de Allande desde lo alto. Es un enorme caserón con apariencia de castillo cuya parte más antigua se remonta al siglo XIV. Tiene tres torres y un patio de armas abierto.
La iglesia parroquial de Pola de Allande: dedicada a San Andrés, data de mediados del siglo XVI aunque sufrió muchos añadidos. Tiene bóveda nervada y retablo manierista de la escuela palentina, Destaca el retablo mayor de mediados del siglo XVI de estilo manierista.
Ayuntamiento de Pola de Allande: obra de Regino Pérez de la Sala, en 1.907.
Monumento del Emigrante: en el campo del Toral (Pola de Allande), recientemente renovado, se levanta este monumento del artista catalán Antonio Prats Ventós, con réplicas en Santo Domingo y Puerto Rico.
San Emiliano: destaca todo el pueblo en su conjunto, así como las casas de la Torre, de Santos y la iglesia parroquial. Declarado conjunto artístico y pintoresco en 1971.
El Valledor: en las parroquias del Valledor, un auténtico valle del silencio, destaca la Torre del Valledor, en San Martín, construida sobre otra edificación anterior, en el siglo XVI, con un Gabinete de Curiosidades. San Salvador, Fonteta, y Villalaín, con bien conservadas construcciones populares. Y el Santuario de Bedramón, en el bosque de su nombre.
fuente:biblioteca publica celestino valledor
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